Las empresas suelen centrarse en formas más nuevas y eficaces de detectar y responder a los ciberataques. Sin embargo, cada vez se hace más hincapié en la importancia de la prevención. Desde el punto de vista de la rentabilidad, la prevención se perfila como la opción más sensata desde el punto de vista financiero. Veamos qué medidas preventivas existen y cuáles debería tener en cuenta para su empresa.
Según un informe de IBM, el coste medio mundial de una violación de datos es de 4,45 millones de dólares. En Estados Unidos, el coste es aún mayor, de 9,48 millones de dólares. El impacto medio de una violación de datos en organizaciones con menos de 500 empleados es de 3,31 millones de dólares (un aumento del 13,4% año tras año). Aunque los costes varían según el país y el sector, las violaciones de la seguridad son sin duda más caras que las medidas preventivas.
El impacto de una violación de datos
El éxito de un ciberataque no sólo tiene que ver con las pérdidas directas ocasionadas por una violación, sino también con los costes indirectos asociados a la reparación de los daños. Esto incluye el tiempo de inactividad potencial, que puede interrumpir la productividad, así como el gasto en estrategias de mitigación y recuperación del sistema.
Los ciberataques también pueden dañar la reputación de su empresa y erosionar la confianza de los clientes, lo que puede tener efectos duraderos. A menudo es incluso más difícil recuperarse de los daños a la reputación que de los costes financieros, ya que dichos daños pueden provocar la pérdida de los clientes existentes, dificultades para atraer a otros nuevos y una percepción general negativa de la marca para el futuro.
Más allá del daño a la reputación y de las repercusiones financieras directas, también existe el riesgo de multas legales o sanciones reglamentarias cuando una brecha expone cualquier incumplimiento de las leyes y reglamentos. Las empresas también pueden enfrentarse a demandas de los clientes afectados, lo que aumenta aún más la carga financiera.
Su enfoque proactivo y sus esfuerzos de prevención pueden reducir significativamente la superficie de ataque mediante la aplicación de varias medidas como:
- Evaluación de riesgos
- Formación periódica de los empleados sobre ciberseguridad
- Actualizaciones periódicas y gestión de vulnerabilidades y parches
- Protección de endpoints basada en IA
- Cifrado de datos
- Seguridad de redes
- Protección del correo electrónico (antispam, antiphishing, antimalware)
- Seguridad en la nube (protección multicapa para el correo electrónico, las herramientas de colaboración y el almacenamiento alojados en la nube)
- Seguridad de dispositivos móviles
- Prevención en la capa de identidad
El ciberseguro como complemento de otras medidas preventivas
Aunque las empresas podrían considerar el ciberseguro como otra medida preventiva, es importante comprender sus limitaciones. A diferencia de las medidas que abordan directamente la seguridad de los sistemas y los empleados, el ciberseguro no evita los ciberataques.
En cambio, puede ayudar a aliviar los daños financieros resultantes de tales incidentes. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que el seguro cibernético puede no cubrir todos los daños potenciales. Esto se debe principalmente a que es difícil cuantificar ciertas pérdidas, como el tiempo de inactividad o el daño a la reputación, con valores monetarios concretos. Además, el proceso para obtener una indemnización de las compañías de ciberseguros puede llevar mucho tiempo.
Por lo tanto, aunque el ciberseguro puede ser beneficioso, no debe confiarse en él como única solución para una gestión integral del ciberriesgo.
Además, las compañías de ciberseguros también suelen exigir que se adopten al menos algunas de las medidas mencionadas.
Detección y respuesta
Aunque unas medidas preventivas sólidas hacen más difícil que los piratas informáticos lleven a cabo ataques con éxito contra su empresa, todavía hay escenarios en los que pueden ser capaces de burlar sus defensas de seguridad.
Por lo tanto, es esencial contar con medidas de detección y respuesta, además de las preventivas. Piense en ambas como complementarias entre sí, combinando sus fuerzas para protegerle a usted y a su empresa.
Las soluciones de detección y respuesta más eficaces utilizan inteligencia artificial y aprendizaje automático. Cuando busque una herramienta de este tipo, busque una que le proporcione una visibilidad excepcional de las amenazas y del sistema, permitiéndole realizar un análisis rápido y en profundidad de la causa raíz con una respuesta inmediata a los incidentes. O puedes ir un paso más allá con una solución MDR que garantice la continuidad del negocio mediante la supervisión de tus sistemas día y noche, lo que apoya a los equipos de TI ayudando con la caza de amenazas, el análisis forense digital y la respuesta inmediata a incidentes.
PREVENCIÓN | DETECCIÓN Y RESPUESTA |
Previene una amenaza antes de que se produzca |
Supervisa los sistemas y envía notificaciones de incidentes de seguridad |
El objetivo es reducir la superficie de ataque de los posibles agresores |
El objetivo es una respuesta rápida a los incidentes de seguridad |
Podría desmotivar a los atacantes que buscan objetivos fáciles |
Contiene rápidamente la amenaza y maximiza la mitigación de daños |
Se consigue a través de medidas como
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Se consigue mediante medidas como
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Si quiere evitar posibles pérdidas económicas, daños a su reputación y mucho más, lo mejor es adoptar medidas preventivas contundentes. La mayoría de los ataques se evitarán incluso antes de que se produzcan, y en caso de que un ciberdelincuente decidido eluda su protección de todos modos, las herramientas de detección y respuesta estarán listas para mitigar el daño.
A la hora de elegir un proveedor de este tipo de servicios, asegúrese de considerar una plataforma que ofrezca todas las posibilidades mencionadas y pueda combinarlas de tal forma que su empresa pueda maximizar los beneficios.